sábado, 23 de noviembre de 2013

Mis esenciales. Parte I: La música

La música: amiga y compañera


La música forma parte de mi vida, una parte muy importante.


Mil cosas no serían iguales en mi vida, si la música no formara parte de ella. Mis recuerdos no serían los mismos, si no fuera por aquellas canciones que forman parte de mi banda sonora.

Hay canciones que te impulsan a hacer cosas, algunas son idóneas para trabajar entre pucheros, otras te empujan a caminar más deprisa cuesta arriba, las hay que te inspiran a la hora de crear, o que te activan cuando te vence el cansancio, o que te serenan cuando has tenido un día de nervios. 

Algunas tienen efectos mágicos, consiguen que tus pies se muevan solos, o tus hombros o tus caderas, o que tu corazón lata más deprisa. Te abrazan cuando te sientes sola, te acunan cuando tienes sueño, te acompañan en las esperas, (los "ya voy" los inventé yo, que me canto mientras espero a que descolguéis el teléfono, y a veces me pilláis . . .)


La música me acompaña en mi ocio y también en mi trabajo, en ocasiones me distrae, y en otras me ayuda a concentrarme. Me imprime ánimos cuando flojeo, y me serena cuando las emociones me pueden. Está a mi lado en las actividades cotidianas y también en las ocasiones especiales.

Muchos sabéis que de vez en cuando como con Barry, o que George no me falla nunca, que Rod se ganó mi corazón, aún más, allí en Tenerife, que me conmueve Caetano, que no me resisto a la sensualidad de Ney, al que adoro, que Miguel me canta al oído lo de Morena Mía,  que pokito a poko Chambao se hizo un hueco importante en mi vida, que Grover, Sade, Enya, y la música celta viven en mi habitación y no en el salón con el resto. . .
Me gustan muchas cosas, muchos estilos, escucho música en inglés, en castellano y por supuesto en brasileño. 

Para ilustrar esta entrada tan musical he dudado entre poner un video o una foto, y al final opte por ambas. La foto, soy yo escuchando música, y en esta ocasión soy fotógrafa y fotografiada.

La elección del vídeo, ha sido un poco más difícil, hay mucho donde elegir . . . 

Al final he optado por una canción que se ha convertido en casi un himno en los dos/tres últimos meses para mi. Es un tipo de canción que me arrastra más que otras. Éstas que empiezan pausadas, y crecen, se elevan, y tú creces y te elevas con ellas, luego, de pronto, se remansan, pero es sólo para coger impulso y volver a crecer y a elevarte hasta la siguiente cima. Así deberían ser las historias de amor, suaves, pausadas al principio, para después ir creciendo de manera incontrolable, cogiendo fuerza, ganando altura hasta que necesitas parar, para tomar aliento, y nuevamente dejarte arrastrar hacia la siguiente cumbre . . . 


En la música es fácil dejarse llevar, en las historias de amor no tanto.  Hay que ser valiente para amar, y arriesgar, y apostar, porque ciertamente puedes perder, pero es la única manera de ganar . . .


(Aclaración: El video es "Broken Strings" de James Morrison ft Nelly Furtado, por si vuestros dispositivos no os dejan verlo.)

Hoy 7 de Agosto de 2014, celebrando la vida, con Ravel y su fantástico bolero...